Es probablemente la frase más usada entre dueños de negocio y es probablemente la principal causa de esclavitud del dueño a su negocio.
¿En qué es en lo que no se puede confiar?
Ejemplo:
Son las 10:00 am, tu empresa que debió de abrir hace una hora no ha abierto, todos los empleados están afuera, y la razón es sencilla, tu gerente no ha llegado.
Ya han llegado clientes pero no han sido atendidos porque no se puede entrar al negocio.
Tu mismo estas ahí esperando a que llegue el angelito.
Es que ¿Cómo me puedes pedir que confíe en ellos Víctor? yo no quiero que un día mi negocio no abra por que al gerente se le hizo tarde, y no quiero andar entregando 30 llaves para que cualquiera pueda abrir, ¿¡Imagínate!?
Totalmente cierto, ahora vamos a entender porqué llegó tarde.
Cuando por fin llega, te acercas con él, lo cuestionas y te dice:
“Perdón, lo que pasa es que ayer salí muy tarde de aquí y tengo a mi mamá malita en mi casa, tuve que llegar a hacerle unas curaciones y acabé como a las 4 de la mañana, y hoy de plano no me pude levantar temprano” “Pero le prometo que no vuelve a pasar”.
Estoy seguro de que más de el 50% de mis lectores se va a ver afectado emocionalmente por la situación de Armando (el gerente).
Tanto que contestarían algo así:
“¿En serio? pobre de tu madre, y ¿Qué le paso? no, si no hay bronca, nomás avisa para sacar otro juego y que la gente no se quede afuera, ¡No seas así!”
¿Verdad?
También, estoy seguro de que menos del 5% contestarían de la siguiente forma:
“Lo siento mucho por tu madre, pero necesito alguien en quién pueda confiar, a partir de hoy estas despedido”
Antes de que me juzgues tengo dos preguntas:
¿Crees tu que alguien más pueda llegar tarde sin avisar ahora que saben que esta permitido siempre y cuando haya una “buena” excusa?
Si Armando hubiera sabido que sería despedido, ¿Hubiera llegado tarde sin avisar? lo más probable es que no.
Crees tu que después de despedir a Armando, ¿Alguno de tus empleados se arriesgaría a levantarse tarde?
No estoy diciendo que no me importa lo que pasa con la mama de Armando.
Mi punto es que la razón principal por la que no tenemos empleados confiables es que nosotros mismos hemos permitido que no sean confiables.
El paternalismo es una de las peores enfermedades de las que padecemos.
Olvídate de que haya sido la mamá de Armando o el tren que se atravesó, o el pie roto o lo que sea.
Estamos acostumbrados a comprar cualquier cantidad de excusas, y aunque me digas, “Yo no Víctor, yo siempre los regaño” ¡Lo que estas haciendo es ser un papá! ¡Eso es paternalismo!
Y al igual que tu a tus papás, un regaño te podía entrar por una oreja y salirte por la otra, y lo que ocurría es que te volvías más hábil para dar excusas, y no más hábil para ser responsable, el regaño no sirve.
Lo que sirve (desde mi punto de vista) es la consecuencia, una reacción causada por una acción.
Si Armando se queda sin trabajo cada vez que llega tarde ¿CREES TU QUE VUELVA A DECIDIR QUEDARSE DORMIDO?, ¡Jamás en su vida!
Y te doy al menos 5 opciones diferentes a la que tomó Armando:
Si estamos hablando de quedarse sin trabajo, ¿Sería una buena inversión tener a alguien que te cobre hasta la mitad del sueldo con tal de que cuide a tu madre y tu puedas llegar temprano a trabajar?
¿Será opción pedirle a algún otro familiar que cuide a su madre?
¿Será buena opción pedirle a una enfermera que pase todos los días a cuidar a su madre?
¿Será buena opción quedarse a dormir en un hotel cerca de la oficina, con todo y su mamá para tener más tiempo para cuidarla?
¿Será buena opción pedirle al patrón vacaciones para cuidar a su madre?
¿Será buena opción avisar desde antes al patrón que su madre esta malita y pedir permiso para llegar tarde?
¿Será buena opción pedirle a algún compañero que pase por la llave para que abra en la mañana?
Y por último, ¿Será buena opción hablar con el patrón a las 5 de la mañana para avisarle de la situación y decirle que mañana no llegará porque su madre esta malita?
Bueno todas ellas son alternativas a la llegada tarde sin abrir el negocio, y todas ellas son alternativas que nos permitirían confiar más en los empleados.
Ósea, no sucedería ninguna de esas alternativas hasta que un empleado cargue con las consecuencias, o en otras palabras se queme con el fuego.
Y no se trata de ser ogro, se trata de enseñar de la manera en la que cualquier humano aprende y DESAFORTUNADAMENTE NO APRENDEMOS A NO TOCAR EL FUEGO HASTA QUE NOS QUEMAMOS.
Y el regaño no quema.
Las opciones ahí estaban, escoger la excusa porque así convenzo al patrón de que no me corra y todos felices es algo que nosotros le hemos enseñado a nuestra gente, nuestra gente tan sólo actúa en consecuencia.
Espero este articulo te acerque más a cumplir tus metas.
Soy un Coach Empresarial exitoso sólo cuando tú eres exitoso.
Sinceramente,
Víctor Salgado.
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